El Eduardo Lamas ejercerá de anfitrión ante el equipo blanco encabezado por Romay, Corbalán y Biriukov El sueño de grandes y pequeños se verá cumplido el próximo 23 de diciembre. Ese día, a las 12 horas, saltará a la pista del Municipal el equipo veterano del Real Madrid de baloncesto para enfrentarse al Construcciones Eduardo Lamas, que ejercerá de anfitrión. José Antonio Corbalán, José Luis Llorente, Fernando Romay, Quique Villalobos, Josechu Biriukov, Juanma López Iturriaga, José Manuel Beirán, Rafael Rullán, Pedro Rodríguez y Javier García Coll, entre otros, serán el centro de los flashes.
El concejal de Deportes, Fernando Varela, cerró el acuerdo con el conjunto blanco en la mañana de ayer. El montante de la operación rondará las 450.000 pesetas (2.704,55 euros) que serán cubiertas por el Concello, quien podría decretar la entrada libre. Una medida que, sin ningún lugar a dudas, dejaría muy pequeño al Pabellón Municipal. «Hablé con Javier Artime, que se encarga de gestionar los partidos del Real Madrid, y me aseguró que después de jugar en Chantada, el 22 de diciembre, lo harán aquí. Con toda probabilidad será a las 12 de la mañana. El concello podría hacerse cargo del costo, por lo que no se cobraría entrada», manifiesta Fernando Varela. Por su parte, Juanjo Rodríguez, presidente y jugador del Eduardo Lamas, se frotaba las manos al ser ya oficial la visita del cuadro blanco. «Nos hace muchísima ilusión. Hay que tener en cuenta que para los jugadores más veteranos del equipo como Ramiro, Pancho, Agustín o yo, supone jugar contra los ídolos que teníamos de pequeños y en tu casa. No puedes pedir más», confiesa. «Eso sí, nos da un poco de miedo tener enfrente a gente como Romay», matiza. Un respeto que no tuvieron dos de los últimos tres adversarios de los veteranos del Real Madrid. El pasado 8 de septiembre, los merengues doblegaron en Zamora al titular por un apretado 80-81. Cinco días después, cedieron un empate con el Aterde (96-96) para dar buena cuenta del Daimiel por cuarenta y tres puntos de diferencia (69-112)

Fuente: La Voz de Galicia